Es una subespecie de la encina, que se diferencia por tener las hojas más redondeadas y de un tono grisáceo en el haz. Presenta una copa densa, con hojas perennes y muy esclerófilas. Es más competitiva en los climas más continentales y secos que la encina, razón por la que se distribuye en las comarcas interiores de Cataluña. Es común en el Baix Berguedà.